Todos tenemos cosas que antes nos encantaban, pero que, por alguna razón, hemos dejado de lado. Ya sea por el trabajo, por tener que cuidar a los niños o simplemente por estar demasiado cansados, todos hemos perdido tiempo para alguna pasión en el camino.
Sin embargo, los pasatiempos pueden brindarnos una vía de escape, expresión personal, distracción y meditación. Pueden cambiar la forma en que nos percibimos a nosotros mismos, a nuestros seres queridos y al mundo que nos rodea. Los pasatiempos también pueden ayudar, dependiendo del tipo de pasatiempo, a mejorar la salud física y el bienestar emocional. Unen a las personas, impulsan la creatividad y el ingenio, nos desestresan y, en general, nos hacen sentir más plenos en nuestra vida diaria.
Quizás nunca hayas tenido un pasatiempo y estés buscando uno. Hay mucha gente que no tiene uno o no sabe cómo encontrarlo. Pero eso no significa que no puedas encontrarlo; no importa si tienes 25 u 85 años (¡o cualquier edad intermedia!), ¡aún estás a tiempo de subirte al tren de los pasatiempos!
¡Reserva un tiempo en tu día y encuentra uno! Una de las mejores maneras de empezar es ver si había cosas que te encantaban hacer de niño. Recuerda esos tiempos y encuentra algún recuerdo de lo que te encantaba hacer. Puede que ahora tengas los mismos intereses que antes. Tal vez disfrutabas de las manualidades o de hacer algo al aire libre. Estos recuerdos pueden ser un punto de partida para empezar a buscar algo nuevo que te guste.
Si no se te ocurre ninguno o sigues sintiéndote perdido, prueba a pasear por tu ciudad o a consultar la página de alguna de ellas para inspirarte. Quizás haya una tienda, una clase o un club al que siempre hayas querido entrar y que pueda despertar tu pasión. Quizás puedas probar a pintar, tejer a ganchillo, montar en bicicleta o hacer senderismo. ¡Participar en un grupo local es una excelente manera de aprender algo nuevo!
La vida puede interponerse a veces, pero si de verdad amas algo, no hay vuelta atrás, solo hay que tomarse un respiro. Quizás descubras que una actividad te apasiona lo suficiente como para añadirla a tu rutina semanal, porque la vida puede ser un lugar maravilloso y gratificante. Dedicar tiempo y espacio a las pasiones e intereses que te impulsan hace que el camino sea mucho más dulce.
